martes, 5 de enero de 2010

Cuando un montón de idiotas tienen razón




El miedo o temor es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta tanto en los animales como en el ser humano


MIEDO.Es la palabra que mas vueltas me da por la cabeza ahora. Me sorprende, verdaderamente me sorprende. Depende de a quien observes, a todos nos afecta de maneras diferentes. El puede paralizarnos. Una pizca de miedo es capaz de dejarnos inmóviles mucho mas de lo que queremos. O puede, por el contrario, movilizarnos. Hacernos ir a donde nunca pensamos que podríamos ir, o hacernos ir a donde nunca querríamos ir también. El miedo, es mas poderoso que cualquier cosa. Se necesita mucho valor para hacer las cosas, o mucho amor, pero no se necesita mucho miedo para detenerse.

Cuando la mitad de nosotros es miedo, y la otra mitad simplemente no, es necesaria una gota mas, una simple gota mas para que nos quedemos totalmente quietos, para que no nos permitamos hacer las cosas. El miedo nos limita. Y muchas veces nos limita tanto que nos convencemos que esos limites son parte nuestra, que no son miedos, que somos nosotros. Pero la verdad es que no somos nosotros. Estamos compuestos por muchas cosas, muchos sentimientos, muchos químico, y muchas hormonas. Todos sentimos miedos. Todos tenemos nuestros miedos que surgen a partir de las cosas que amenazan nuestro equilibrio, el equilibrio de nuestra vida. Es que verdaderamente somos criaturas complejas. Las cosas mas inesperadas pueden inspirarnos, llenarnos de vida, o detenernos.

Es como un virus. Un virus,mas bien un parásito. El miedo se mete dentro tuyo y te nubla. Mientras caminas por la vida te vas dando cuenta que a medida que pasa el tiempo, las cosas tienden a complicarse, el hombre tiende a complicarse. Se complica nuestra forma de pensar, se complica nuestra forma de ver, se complica nuestro juicio. Cuanto mas consientes de nuestro entorno somos, cuanto mas racionales nos volvemos, mas se complica. Porque los miedos, son nuestro uso de razón. Tememos porque razonamos, porque entendemos que las cosas no son simples, porque entendemos que nosotros no somos simples. Las cosas se nacen, se desarrollan y mueren, tal como nosotros. Las cosas se destruyen. Nosotros nos destruimos. Y no hablo de la muerte, eso seria demasiado sencillo. Hablo de eso que nos pasa mientras caminamos la vida. A medida que nos complicamos, se complican nuestros sentimientos, se intensifican. Nuestro gran gran problema, la causa de la gran mayoría de los miedos, es el amor. AMAMOS, y eso nos condena a temer. Razonamos y entendemos las cosas porque somos seres pensantes, amamos porque somos seres que sienten, y mezclando esos dos factores, TEMEMOS.

El amor es irracional, y ese es el problema. Se ama con locura, con pasión o con recelo. El amor nos sublima y nos destruye. A medida que caminamos el camino de la vida, el amor se vuelve el centro de ella. Tememos no encontrar ese amor, tememos no entenderlo, no saber manejarlo, tememos perderlo. El amor, el miedo, hay que entender que van de la mano. No tenemos uno sin el otro. No tenemos amor sin temerle, no tenemos miedo sin tener amor, ya sea por ti, por tu familia, por tu vida, por lo que sea. Tomamos decisiones importantes basandonos o en uno, o en otro. Pero mi problema hoy por hoy, no es ni la falta de miedo, ni la falta de amor. Mi problema es que el miedo nos divide. Nos divide en dos tipos de personas: las que lo integran dentro suyo, y las que no. Yo por mi parte, no siento que el miedo se incorpore en mi, no siento que el miedo me detiene, siento que el miedo me enfrenta. Se para frente a mi, y me separa de las cosas que mas quiero. Porque muchas veces nos equivocamos en lo siguiente, y presten atención. Muchas veces amamos tanto tanto, que es inevitable temer. Tememos perder eso que amamos, y lo terminamos perdiendo simplemente por temer. Es que el miedo es traicionero, no juega con nosotros juega en nuestra contra. Nunca aposta al final feliz. El miedo es nuestro enemigo.
Y no digo que yo siempre lo supero, no es así. La mayoría de las veces en la lista de los miedosos soy la que la encabeza, pero mi estrategia no consiste en vencerlo. Mi estrategia consiste en llenarlo de amor. Puedo temer, siempre voy a temer, pero mientras ame mas de lo que temo, no tengo de que preocuparme.

Hoy no escribo por mi miedo, hoy escribo por el miedo que siente alguien a quien amo. Hoy escribo porque el miedo que enfrenta a esta persona que amo, le esta ganando. Escribo porque hoy me di cuenta que yo elegí amar a alguien que ya integro el miedo, integro los limites tan dentro suyo, que ni siquiera se puede imaginar vivir sin ellos. EL MIEDO NO ES PARTE NUESTRA. El miedo nos limita y el muy desgraciado nos regala una opción mas para vivir. Vivir dentro de el es posible. Vivir en el miedo se puede, es verdad, pero HAY MAS. Hay mas cosas para sentir, mas cosas para explorar, mas cosas que el miedo no te puede dar. Quien nunca ha amado no sabe lo que se siente eso. Quien nunca ha amado no entiende porque la gente arriesga tanto por amor. Pero yo solo quiero apuntar a una cosa, si hay tantos idiotas arriesgando todo por amor, perdiéndolo todo ¿Por algo será no?


Muchas veces, un idiota tienen mas razón que el mas razonable.
-S-




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Black Moustache